En este sentido, el director general de Pesca, Antoni M. Grau, ha explicado que «en un contexto en el que cada vez proliferan más imágenes y videos compartidos por pescadores aficionados en las redes sociales, hemos detectado, lamentablemente, que algunas de estas publicaciones muestran actitudes negligentes o actividades ilegales. Este fenómeno no se limita únicamente a la exposición de comportamientos cuestionables, sino que también se observa una tendencia preocupante: los seguidores emulan estas prácticas y adoptan conductas irresponsables sin ser conscientes de las implicaciones que tienen», ha añadido.

Por todo esto, con el propósito de contrarrestar esta tendencia y prevenir la escalada de estos comportamientos, los inspectores de la Dirección General de Pesca han puesto en marcha una campaña de control e inspección específicamente orientada a abordar esta problemática.

Hasta ahora, se han registrado cuatro casos de infracciones graves, que podrían comportar sanciones de hasta treinta mil euros.

Agricultura, Pesca y Medio Natural quiere recordar que existe una dirección electrónica para obtener más información o para reportar posibles infracciones: pesca@dgpesca.caib.es.