Se les da una copia de un cuadro famoso, que deberán de interpreta a su manera. Todos juntos comentan las obras y las presentan.

La obra seleccionada es un cuadro de Keith Haring, un autor del cual conocieron su obra en la exposición de La Nave Salinas y que había despertado el interés general.

Cada usuario dibuja y colorea a su gusto la obra, con una actitud positiva que estimula su espontaneidad y desarrolla la comunicación a través del trabajo creativo y la verbalización final.