Gestión del ciclo integral del agua
El ciclo natural se inicia con la evaporación del agua del medio natural. Desprendido se condensa a la atmósfera, precipita en forma de lluvia sobre la tierra, alimentando los acuíferos y ecosistemas, y, finalmente, acaba en el mar. El hombre interfiere en este ciclo al impermeabilizar las superficies, cambiar la circulación de las aguas superficiales, captar las aguas superficiales y subterráneas, y devolver las aguas utilizadas al medio.
El ciclo urbano incluye desde los sistemas de captación, el tratamiento y distribución para abastecimiento urbano, pasando por el saneamiento de las aguas residuales utilizadas y su depuración, así como el retorno al medio o su reutilización.
El ciclo integral del agua incluye los anteriores y se gestiona desde la Administración Hidráulica, aunque los ayuntamientos son los responsables del ciclo urbano del agua y son los que tienen las competencias correspondientes en abastecimiento y saneamiento, incluyendo la depuración.
La Administración Hidráulica hace la planificación de la gestión de los recursos naturales y vela por su conservación, con el objetivo de garantizar la sostenibilidad del recurso. En el caso de las Islas Baleares, esta Administración Hidráulica colabora en la depuración de las aguas residuales de algunos municipios mediante convenios subscritos con ABAQUA.
La corresponsabilidad y la implicación de los gestores, administraciones públicas y usuarios, así como el fomento de la gobernanza, son aspectos clave para la gestión correcta del ciclo integral del agua.
En las páginas siguientes se encontrará más información sobre los temas siguientes: